Es común que al llegar a casa tras pasar varias horas fuera de ella notemos en su interior el olor más o menos fuerte de nuestra mascota. En el caso de los perros esto ocurre con mayor frecuencia, ya que su olor corporal es más intenso que el de otros animales de compañía.
Es importante saber que el olor también dependerá de la raza de la mascota y de su nivel de grasa corporal. En primer lugar, recomendamos fijarse bien en la intensidad de este olor, ya que si es más fuerte de lo habitual sería conveniente llevarlo al veterinario. En ocasiones, el olor excesivo puede ser consecuencia de alguna enfermedad y será el experto quien deberá descartarlo.
En caso de que el mal olor sea el habitual, es posible minimizarlo siguiendo unos consejos de higiene:
Y para seguir cuidando la salud de las mascotas, recuerda que tendrás que utilizar productos de cuidados dermatológicos desarrollados exclusivamente para ellos.